Así, al menos, lo sienten ellos mismos. No, no es una mentira de la malvada derecha, ni un invento de unos radicales religiosos… es un joven, enfermo de ELA, al que Pedro Sánchez prometió mejores cuidados paliativos y al que, de momento, solo le ofrece la posibilidad de que lo ayuden a suicidarse o, cuando ya no tenga consciencia, que lo mate un médico en un hospital. como leemos en EUVITA.ORG. Jordi Sabaté, enfermo de Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA), ha criticado a Pedro Sánchez por sus promesas incumplidas a quienes padecen esta enfermedad, mortal e incurable.
«Hace casi un año me dijiste que te comprometerías a trabajar para que los enfermos de ELA tengamos ayudas para poder tener una vida digna y no vernos obligados a morir antes de tiempo. A día de hoy sólo nos ofreces la eutanasia. ¿Y las ayudas para vivir?», ha escrito Sabaté, en su perfil de Twitter.
El joven se hace eco de un tuit del propio Sánchez quien, en febrero del año pasado, se comprometió a «seguir trabajando para mejor el diagnóstico, el tratamiento y la vida de los enfermos y sus familias».
Sánchez respondía así a Sabaté, quien denunciaba el abandono sufrido por los enfermos de ELA.
«Esto es un mensaje para el Gobierno de España, liderado por el Sr. Pedro Sánchez. 4.000 españoles enfermos de ELA nos estamos muriendo, y cada año mueren 1.000 enfermos más. Nos tienen abandonados y me gustaría saber el motivo. Gracias por su atención. Un saludo», escribía en un tuit dirigido al presidente socialista.
Sabaté, que padece ELA desde hace seis años, impulsa la campaña #mueveundedoporlavida, cuyo objetivo, según ha explicado él mismo, tiene como objetivo «priorizar la ayuda para vivir antes que para morir».
La campaña insta a las autoridades públicas a «invertir todos los recursos humanos y económicos para que todos los enfermos puedan tener una vida digna, cosa que hoy en día no se está haciendo». A juicio de Sabaté, «para tener una vida digna tenemos que estar bien asistidos y cuidados. Y para eso necesitamos ayudas sociales que a día de hoy no tenemos. También más inversión en investigación para poder vivir esperanzados y encontrar una cura a nuestras patologías», subraya.
Sabaté se ha mostrado muy crítico con la nueva ley de eutanasia, impulsada por el PSOE, y que el pasado 17 de diciembre se aprobó en el Congreso de los Diputados con el voto en contra de PP y Vox.
Debate en el Congreso
España es el único país de Europa con una «prestación de ayuda a morir», pero sin un acceso universal a los cuidados paliativos.
El diputado ‘popular’ José Ignacio Echániz destacó que sin cuidados paliativos «no hay posibilidad de elección, ni libertad porque lo único que se ofrece a los pacientes es la eutanasia».
«El nivel de civilización y madurez de un país se mide por cómo trata a los más vulnerables. Responder con la eutanasia a la deuda que nuestra sociedad ha contraído con sus personas mayores y sanitarios no parece el mejor camino de la responsabilidad, la solidaridad intergeneracional, ni la mínima solidaridad social y política», reprochó Echániz.
La norma recoge que esta práctica se podrá llevar a cabo en el país a pacientes que los soliciten y que se encuentren en un contexto de «padecimiento grave, crónico e imposibilitante o enfermedad grave e incurable, causantes de un sufrimiento intolerable».
Este solicitante deberá tener nacionalidad española o residencia legal o certificado de empadronamiento que acredite un tiempo de permanencia en territorio español superior a 12 meses; tener mayoría de edad y «ser capaz y consciente en el momento de la solicitud».
Desde Vox se calificó la ley de «traición despiadada, inhumana e ilegítima», y se criticó a los partidos «que firman sentencias de muerte a los más débiles». A su juicio, se esta «quebrantando el derecho a la vida» con esta norma y cree que el Estado prefiere esta decisión porque es «más fácil, más cómodo y económico».
Por su parte, desde el Gobierno, la diputada y ex ministra de Sanidad María Luis Carcedo, defendió el «avance» en «libertad» que supone esta medida y reprochó que «la derecha siempre se enzarce» en batallas apocalípticas» durante la tramitación de este tipo de leyes y, «pasado un tiempo asuma» estos avances y «pasado otro tiempo los practique».
Desde Podemos se reprochó a PP y Vox que «nieguen a quienes no tienen dinero» o «no piensen como ellos» el derecho al uso de su «libertad personal» porque «no les importa la libertad personal» y quieren «imponer» al resto de españoles «cómo deben morir».