La Inquisición española ha sido tema de un amplísimo debate desde el siglo XVI hasta la actualidad. Para los protestantes del norte de Europa fue el enemigo a batir, para los ilustrados franceses, los liberales españoles y la izquierda española el motivo por el que en España se había producido un retraso con respecto al resto de países europeos. Y para la mayoría de la intelectuales del siglo XVIII y XIX una ignominia de España, culpa del carácter español y la iglesia católica, una especie de estigma racista que identifica a los españoles igual que a Caín, o una marca como el nazismo para los alemanes.

Hoy en día esta visión de los siglos precedentes se ha revisado gracias al estudio sistemático de las fuentes originales disponibles en el archivo histórico nacional y corroboradas parcialmente por la reciente apertura de los archivos custodiados en el Vaticano relativos a la inquisición en 1998 por Juan Pablo II. Fuentes que ninguno de los críticos y estudiosos de los citados periodos usaron porque entre otros motivos no estaban disponibles para su consulta.
Esta nueva oleada de investigaciones lideradas indiscutiblemente por Henry Kamen concluyen que muchas de las cifras de ejecuciones de la Inquisición española se han exagerado notablemente. Según su análisis sistemático de los archivos, concluye que se ejecutó durante los trescientos años de existencia, y en todo el imperio español, un rango de entre 1300 y 3000 personas, en algunos casos se llega a dar la cifra de 10.000, sobre una población total, solamente en la península de 8 millones de habitantes en el siglo XVI y de 10 en el siglo XVIII. Del número total de investigaciones solamente se ejecutaba a entre un 1 y un 2%.
Sin embargo estas cifras contrastan bastante con algunos ejemplos de la inquisición equivalente en Europa. Por ejemplo en Holanda existió un tribunal de la Inquisición completamente independiente del español que ejecutó a 1300 personas en 1562. En Francia se produjo la masacre de San Bartolomé en 1572, que consistió en el asesinato masivo de protestantes por todo el reino y las estimaciones sitúan el número de muertos entre 5.000 y 30.000. En Alemania se procesaron y ejecutarán 1000 personas por brujas y hechiceros en Bamberg en 1631. En Inglaterra tras las investigaciones de Matthew Hopkins se ejecutarán a 300 Brujas. Por el contrario el juicio por brujería más numeroso de España que es el de Brujas de Zugarramurdi se ejecutaron 6 brujas. Estas cifras resultarían ridículas si se comparan con el equivalente a la policía religiosa del imperio islámico otomano de su tiempo. Cifras igualmente ridículas si se comparan con los 100 millones de ejecuciones del comunismo ideología de izquierdas reconocida por su tolerancia.
La razón de por qué se ha puesto el foco de atención mundial especialmente en la Inquisición española?, La guerra entre España y los países protestantes y el recelo de otras potencias católicas como en Francia, que competían con España por el dominio en Europa y la expansión en las Américas. Fue una clara estrategia de difamación del enemigo liderada por Inglaterra y en menor medida Holanda, que además contaron oportunamente con las primeras imprentas de Europa junto a Alemania. Es como si solamente estos tres países dispusieran de Twitter y Facebook y nadie más lo hiciera en el sur de Europa. Esta estrategia, bastante efectiva en la derrota del enemigo se ha empleado en múltiples ocasiones por ejemplo contra Alemania en la primera y segunda guerra mundial, es notable el desarrollo de la cartelería, (precedentes de los memes) para difamar al enemigo en Reino Unido y América. Sin embargo, aunque la difamación es una estrategia de guerra, vale cualquier cosa en la guerra? no es hipócrita acusar a alguien de algo en lo que el acusador es especialmente culpable?. No es absolutamente contrario a por qué ¿Por qué fijarse en la paja en el ojo de tu hermano y no te das cuenta de la viga que tienes en el tuyo?
Por otra parte los índices de libros prohibidos no era ninguna novedad en Europa, desde luego no lo fue en el mundo islámico en absoluto, y en cualquier caso la España de siglo XVI no podría ser tan eficaz como la actual en detectar contenidos prohibidos. Incluso con los actuales medios que incluyen la inteligencia artificial internet incluye un amplio número de contenidos prohibidos, cuanto más en el siglo XVI con los medios del siglo XVI?. Por último, la inquisición española no tuvo como objetivo la persecución de los científicos, el caso más usado desde la propaganda protestante fue el de Galileo, pero éste aunque efectivamente fue sometido al proceso inquisitorial nunca fue ejecutado, y en cualquier caso ese caso no puede atribuirse a la inquisición española sino a la italiana. Por otra parte, la Inquisición no puede haber intervenido de un modo relevante en la producción de ciencia y tecnología en España porque tras 200 años de abolición de la Inquisición la ciencia española tiene una producción científica similar a la que tenía en el siglo XIX en términos relativos respecto a sus vecinos europeos, EEUU, o China. Es una potencia media y la supresión de la Inquisición no implicó ningún desarrollo de la ciencia en este país como en otros, luego no pudo contribuir negativamente al desarrollo científico español.
En cualquier caso, la Inquisición española cometió graves faltas contra los investigados por su procedimiento y falta de garantías. Pero es grave a los ojos de una persona de nuestro tiempo. En los siglos en los que se desarrolló la persecución de la herejía era más la norma que la excepción. De hecho, por las cifras de ejecuciones cabe pensar que la Inquisición española fue mucho menos salvaje que otras equivalentes de su tiempo en Europa y fuera como la islámica Otomana. Esto podría apoyarse por testimonios extraídos de la época en los que se han identificado presos que habían blasfemado para ser enviados a cárceles de la inquisición ya que éstas tenían mejores condiciones.
Aunque la inquisición ha sido reconsiderada en el mundo científico y académico, los medios de comunicación y no pocos políticos siguen ampliando el mito de la inquisición. ¿Por qué? Porque vende. No importa si es verdad o mentira pero vende. Finalmente creo que es bastante cierta la famosa frase de Orwell: «la historia la escriben los vencedores». Y los vencedores de España y de la iglesia católica española han sido primero los países protestantes, en especial Inglaterra, y en segundo lugar, los países liberales caracterizados por detestar el cristianismo del cual España hizo su bandera.
Fuentes:
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Kamen, H. (2014). The Spanish Inquisition: a historical revision. Yale University Press.
Henningsen, G. (1993). The Database of the Spanish Inquisition: The relaciones de causas Project Revisited. Vorträge zur Justizforschung: Geschichte und Theorie, 2, 43-85.
Thomas Madden (2004). The Real Inquisition. National Review. https://www.nationalreview.com/2004/06/real-inquisition-thomas-f-madden/
Càrcel, R. G. (1976). Orígenes de la Inquisición española: el Tribunal de Valencia, 1478-1530 (Vol. 132). Ediciones península.
Kamen, Henry: The Spanish Inquisition: A Historical Revision, Yale, 1999
Pérez, Joseph: The Spanish Inquisition: A History, Profile Books, 2006
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