ASÍS Pretende impulsar una economía al servicios y comprometida con las personas.

(EL ROTATIVO) Nos empeñamos en debatir sobre si economía de mercado, capitalista o socialista; sobre si queremos una mayor o menor intervención del sector público y del mercado; sobre si necesitamos un crecimiento sostenible, inclusivo, que tenga en cuenta las desigualdades o si buscamos por contrario el decrecimiento y una economía más ecológica… Pero todo ello lo hacemos sin cuestionar el paradigma economicista en el que vivimos, en el que la economía se pone por encima de todo.

El Bien Común: Un cambio real de paradigma económico

La irrupción del coronavirus ha obligado al confinamiento de media Europa, Asia y ahora también Estados Unidos. Esta crisis sanitaria está poniendo en cuestión el sistema económico de Occidente y sometiendo a un estrés a la economía mundial, cuyas consecuencias aún son difíciles de predecir. Una de las ideas que, en estos momentos, está aflorando entre los principales agentes económicos, sociales, políticos, culturales es que después de esta crisis sanitaria nada será igual, tampoco el propio sistema económico lo que está llevando a autoridades políticas, económicas, sociales a comenzar a pensar o repensar hacia donde debemos dirigir los pasos como sociedad en el ámbito económico.

Antes de que la sociedad atravesase esta situación de crisis sanitaria, el Papa Francisco ya clamaba desde el inicio de su pontificado por un cambio en el modelo económico actual, con el deseo y objetivo de volver a poner en el centro del sistema económico al hombre de toda condición con especial atención al descartado, al pobre, al desfavorecido. Bajo esta premisa el Santo Padre convocó para finales de marzo, en Asís, un encuentro internacional de jóvenes llamado ‘The Economy of Francesco’ (La Economía de Francisco) con el objetivo de concienciar e impulsar en las nuevas generaciones el desarrollo de una nueva economía mundial, más justa, sostenible y con ese nuevo protagonismo para quienes, en la actualidad, se encuentran en los márgenes de la sociedad.

Como consecuencia de esta crisis sanitaria mundial, el Papa Francisco y la organización de este encuentro internacional no tuvo más remedio que aplazar dicho evento hasta noviembre, mes en el que previsiblemente la situación se habrá estabilizado y deseamos que, normalizado. Entre los pocos seniors invitados a este evento, se encuentra convocado el profesor de Economía de la CEU UCH, Enrique Lluch. Él será uno de los cuatro españoles, mayores de 35 años, que acudirá a este encuentro del cual nos habla en esta entrevista en la que, además, nos introduce y aborda qué se entiende por “La Economía de Francisco”.

El maestro de la CEU UCH publica el libro ‘Una economía para la esperanza’, donde plantea una «racionalidad de lo suficiente»

Enrique, ¿en qué consiste la idea de la ‘Economía de Francisco’?

Desde el principio del pontificado, Francisco, ha estado incidiendo en la idea de que es necesario evangelizar la economía porque ella es una de las causas principales de que nuestro mundo no sea solidario, que exista una cierta apatía a la hora de hacer las cosas, que se prioricen los valores mercantiles o economicistas sobre los valores civiles. Ya en ‘Evangelii Gaudium’ abordó esta cuestión e introdujo este tema siguiendo, un poco, la línea de Benedicto XVI en ‘Caritas in veritate’, también lo introdujo en el mensaje del Día Mundial de la Paz de 2013 y en su ‘Laudato Si’. Y ahora creo que, un poco respaldado por las personas que ayudaron en su momento al Papa Emérito Benedicto XVI a escribir ‘Caritas in veritate’ y que se encuentran activos profesionalmente, sobre todo se trata de personas ligadas a la escuela de economía civil italiana, ha surgido la idea de hacer un manifiesto para que la gente de todo el mundo se adhiera a él y pueda iniciarse el camino hacia una economía al servicio de las personas. Y, ante todo esto, la mejor manera de impulsar este cambio es contando con los jóvenes, con las personas menores de 35 años, puesto que ellos, no cabe duda que son el futuro.

¿Por qué se ha escogido Asís?

Yo creo que se decide convocar a los jóvenes de cualquier rezo, religión y país en la ciudad de Asís, Italia, pensado en el ejemplo de San Francisco, ya que a partir de la pobreza surgió un movimiento que luego derivó en los primeros Montes de Piedad, los bancos más antiguos de Italia, creados por la Orden de los Franciscanos los cuales impulsaron una economía puesta al servicio de los más pobres. Reunirse también en Asís implica un guiño, un reconocimiento a San Francisco y al cuidado de la creación. Es un buen lugar, lleno de significado para alumbrar un manifiesto sobre el que fundamentar y construir una economía que, en lugar de priorizar a los que más tienen, prioriza a los que menos tienen. Una economía nueva que además pone el acento también en el cuidado de la creación y no en su explotación, tal y como está haciendo la economía actual.

¿Y por qué dirigirse a los jóvenes?

Porque ellos son el futuro. Y porque, además, el joven está más cercano a la infancia, más cercano al espíritu de hacer las cosas con el corazón. Ellos son quienes pueden pilotar el cambio.

¿Cuáles son los objetivos de este encuentro aplazado, ahora, previsiblemente para noviembre? 

Los objetivos son los de hacer un manifiesto en el que se hable de cómo construir una economía diferente al servicio de las personas y que priorice a los más pobres, además de ser sostenible a lo largo del tiempo. A partir de este manifiesto esperamos que la gente de todo el mundo se una y trabaje en esa línea para crear una masa de economistas, técnicos y especialistas que quieran construir una economía diferente.

“LOS JÓVENES SON EL FUTURO, ELLOS SON LOS QUE PUEDEN PILOTAR EL CAMBIO HACIA UNA NUEVA ECONOMÍA”

¿Y qué es lo que se espera del encuentro?

Se espera que realmente sirva para que todos aquellos que quieran construir una nueva economía, comprometida con las personas, tengan un foco, un manifiesto, una manera de hacer las cosas a la que adherirse y así todos los que ahora estamos trabajando de una manera dispersa en todo el mundo, tengamos una referencia y una misma línea de actuación que seguir.  Es necesario unirnos y tener un punto de apoyo que aglutine todas las iniciativas que ahora están diseminadas y están en marcha en distintos puntos del mundo y en ese sentido, creo que este encuentro puede ser una oportunidad muy importante.

Actualmente, ¿dónde se está desarrollando, ya, la ‘Economía de Francisco’?

Aquí en España tenemos varios grupos de jóvenes, en varias provincias españolas, que están desarrollando esta iniciativa y tenemos en proyecto algunos otros. Aunque va despacio porque deben ser los jóvenes los que lo impulsen, en algunas provincias se ha conseguido ya crear grupos que están reflexión en torno a esta idea de una nueva economía. En España es una iniciativa un poco innovadora, pero en otros países ya se están haciendo conferencias, eventos particulares y actividades. Nosotros creemos que esto no es una cuestión de eventos particulares sino de procesos y por eso hemos creado grupos en distintas provincias.

¿Qué implicación tiene la Universidad CEU Cardenal Herrera en esta iniciativa?

Estamos colaborando, tanto en Madrid como en Valencia. Y, en mi caso, volviendo al encuentro de Asís, seré uno de los pocos seniors que estará allí. De España solo iremos cuatro y allí, de todo el mundo, solo llegaremos a ser un centenar de seniors.

“ASÍS PRETENDE IMPULSAR UNA ECONOMÍA AL SERVICIO Y COMPROMETIDA CON LAS PERSONAS”

¿Cómo está funcionando la iniciativa en España y en la Comunitat?

Aquí en España cada grupo lleva su ritmo y en Valencia y en Zaragoza, por ejemplo, los grupos funcionan bien. El grupo de Alicante ha empezado hace poco y en él también está participando gente de nuestra universidad y en Sevilla se va a crear otro grupo que estaba interesado en la iniciativa.

Finalmente, ¿cuáles van a ser las próximas acciones a desarrollar a pesar de las circunstancias en las que actualmente nos encontramos todos inmersos? 

Seguiremos trabajando en nuestras iniciativas en la medida de nuestras posibilidades y a la espera de la celebración del encuentro que ha sido pospuesto, en un principio, para noviembre por la actual crisis sanitaria ocasionada por el coronavirus. Y en el caso de Valencia seguiremos haciendo reuniones cuando se pueda y, cuando se celebre el encuentro, el siguiente paso será ponernos a trabajar sobre los contenidos que conforme el manifiesto que de allí surja.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *