Responsabilidad SÍ, Estado de Alarma, NO

Con el fin del Estado de Alarma se han disparado todas las alertas. Las fotografías de macrobotellones, de la Puerta del Sol a rebosar -y de otros lugares por toda España- han hecho que mucha gente, incluso desde la oposición a Pedro Sánchez, vuelva a pedir medidas expepcionales para coartar los derechos fundamentales de los españoles. Y no es eso. Necesitamos responsabilidad, no vivir en un estado de semilibertad.

Responsabilidad frente al Covida y no estados de alarma

Los españoles hemos vivido prácticamente un año -de prórroga en prórroga de una medida excepcional y limitada en el tiempo- con muchos de nuestros derechos fundamentales -reunión, circulación…- limitados, cuando no directamente cercenados. Llevamos mucho tiempo permitiendo que el Ejecutivo gobierne como le interesa y sin dar explicaciones.

No puede ser que la Democracia no sirva para afrontar crisis como la pandemia del Covid. Si no tenemos más herramientas que la limitación de derechos fundamentales y permitir al Gobierno arrogarse poderes especiales, ¿para qué sirve la democracia en tiempos de crisis? Se está dando la razón a las dictaduras paternalistas que «saben» lo que es mejor para sus ciudadanos.

Límites que respeten los derechos fundamentales

No puede ser así. Se deben establecer normas firmes, y que se hagan cumplir, dentro del marco de la Constitución. Nuestros políticos, de la mano de jueces y expertos en Derecho, deben buscar fórmulas para que el Estado de Alarma sea innecesario. Trabajando juntos, no aprovechando una pandemia que ya deja más de 100.000 compatriotas fallecidos para buscar su oportunidad política.

Pero, sobre todo, necesitamos responsabilidad. Necesitamos que la sociedad demuestre que no necesita tutelajes policiales. No sólo los jóvenes que han estado de botellón o de fiesta. Todos debemos ser responsables y entender que el Estado de Alarma ha terminado, pero no el Covid. Y que depende de todos y cada uno de nosotros el derrotarlo. Igual que depende de todos y cada uno de nosotros que sigamos siendo libres.

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