corrupción
Todos se cubren, ninguno dimite. ¿Democracia? No insulten nuestra inteligencia.
El bochornoso espectáculo que el Estado de Alarma deja en la historia de nuestra «democracia» no sería tan tremendo si, mientras tanto, la ciudadanía no anduviera más pendiente de cuando puede ir a la playa o cuando vuelve la liga, en lugar de como nuestros Gobernantes pisotean todas las instituciones del Estado.